Eyaculación y orgasmo son dos procesos que la mayoría de las veces funcionan al unísono pero ¿sabías que muchas veces no es así? El primero puede ocurrir sin el segundo y viceversa.
Eyaculación y orgasmo son dos procesos diferentes. Por eso es posible que un hombre tenga un orgasmo sin eyacular o que eyacule sin tener un orgasmo
El primer proceso se encarga de eliminar el semen mediante el funcionamiento de varias estructuras. Sin embargo, el segundo implica tanto el cuerpo como la mente. El orgasmo es el punto de máxima tensión sexual que acaba por liberarse.
Por todo esto, se puede sentir el máximo placer sin eyacular mediante el control de las estructuras preparadas para la eyaculación. A esto se le llama eyaculación retrógrada y está muy vinculada culturalmente a la meditación.
También conocéis todos ejemplos de eyaculación sin orgasmo. Por ejemplo, durante las liberaciones nocturnas que tan falsamente se cree que son provocadas por sueños eróticos. El proceso se activa sin que haya sensaciones placenteras de por medio.
A veces estamos acostumbrados a ver nuestro mundo de una forma muy cuadriculada cuando la realidad es que las posibilidades son mucho mayores. En este vídeo te cuento un poco más:
