¿Alguna vez has deseado o te has preguntado cómo convertirse en un auténtico empotrador? Si es así, sigue leyendo porque en el post de hoy te doy mis 4 mejores consejos para conseguirlo. ¿Listo? ¡Empezamos!
4 claves para convertirse en un empotrador
La idea de hacer este vídeo viene por un paciente que tuve durante la pandemia. Por aquel entonces, tenía un chico que acudía a mi consulta de forma presencial para poner solución a sus problemas de erección después de varias experiencias malas.
Por motivo de las restricciones, había estado un tiempo sin poder ver a su pareja y aprovechó ese momento para tratar su problema en consulta. Después de un tiempo de terapia, llegó el momento de volver a verla y tuvimos una cita en mi clínica. Le pregunté cómo se sentía en ese momento con respecto a cuándo llegó y me dijo que ahora se sentía un «empotrador de la pradera». ¡Y así fue! Vino, más adelante, a una sesión de revisión y no necesitó más.
Ahora sí, ¿qué hay que hacer para convertirse en un empotrador? Aquí van mis 4 claves.
1. ¿Qué significa ser un empotrador?
Lancé la pregunta en mi Instagram y recibí respuestas muy diversas.
Los chicos comentan que tiene que ver con llevar la iniciativa durante la penetración y darle como cajón que no cierra. Hacen referencia a penetraciones rápidas y fuertes.
Las mujeres, por otro lado, dicen que es aquel que se centra solo en el coito y en el mete-saca como un mandril, que solo quiere meterla.
Es curioso porque ante el mismo significado, los hombres lo ven como algo positivo y las mujeres no tanto.
Por último, encontramos otro significado que es el que comparte la mayoría de las mujeres. En este caso, comentan que se trata de una actitud, que sepa tratarte como te gusta, moverse y moverte, cómo te hace sentir. Apasionado, ardiente, muy sensual. Un tipo que lleva la batuta y te sabe leer.
Como ves, está muy centrado en la ACTITUD y no tanto en el mete-saca.
2. No se trata de ser un actor en el sexo
Debes tener algo claro: para ser un empotrador no tienes que fingir ser lo que no eres en el sexo. Consiste en sacar esa vena pasional y jugar con tu actitud intentando tomar la iniciativa y esto es algo que funciona cuando te dejas llevar y lo das todo.
No tiene que ver con tener grandes erecciones o que estés todo el rato ahí dale que te pego con el mete-saca. NO. Es una cuestión de actitud y de tomar las riendas de la situación.
3. Olvídate de lo que ves en la pornografía
Sal del modelo pornográfico y enfócate en el modelo actitudinal. Normalmente, la pornografía nos hace creer que todo es cuestión de penetración y ya está. La realidad es que a las mujeres les importan otras muchas cosas más… Así que no te dejes llevar por los patrones de la pornografía.
De hecho, en mi curso «gran amante» te enseño todo lo que tienes que saber para convertirte en un amante TOP que las deja 100% satisfechas. 8 módulos repletos de vídeos 100% prácticos + una asesoría individual conmigo. Tienes toda la info aquí.
4. Comunicación
Puede ser que a tu pareja no le vaya el rollo empotrador y le guste el sexo tántrico o algo más ingenuo o calmado. ¡Para gustos, colores!
Debes entender que cada persona es un mundo y cómo no te comuniques correctamente con tu pareja no te vas a enterar de lo que le gusta. Así que… habla con ella, comunícate e interésate por saber qué es lo que quiere. ¡Eso nunca falla!
Cómo convertirse en un empotrador, ver el vídeo
¡Ahora sí! Te dejo con el vídeo del canal, donde hablo más en detalle sobre el tema. Espero que te resulte de ayuda y que lo compartas con aquellos chicos a los que les pueda venir bien.
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