Una de las situaciones más habituales que veo en consulta es esta: llegan con problemas de bajo deseo, dificultades con la erección o simplemente no llegan al orgasmo, y cuando empezamos a hablar, me cuentan que toman ansiolíticos o antidepresivos desde hace tiempo. ¿Te suena esto?
Hoy quiero hablarte de cómo este tipo de medicación puede afectar a tu vida sexual y voy a aclararte algunas de las dudas más frecuentes que recibo tanto en la consulta como en las redes sociales.
¡Coge papel y lápiz porque empezamos!
Las dudas más frecuentes sobre ansiolíticos y sexualidad
Algunas de las preguntas más repetidas que me hacéis son:
- Tomo ansiolíticos desde hace tiempo y he perdido por completo el deseo sexual, ¿es normal?
- Desde que empecé con la medicación me cuesta muchísimo llegar al orgasmo, ¿Tendrá algo que ver?
- ¿Se puede recuperar la sexualidad después de dejar los ansiolíticos?
No te preocupes, que voy a explicarte cómo afecta a tu respuesta sexual y sobre todo, qué puedes hacer.
¿Qué efectos tienen los ansiolíticos sobre la respuesta sexual?
Los ansiolíticos y antidepresivos afectan directamente a tu respuesta sexual: desde la excitación, pasando por la erección o lubricación, hasta llegar al orgasmo. En muchos hombres provocan eyaculación retardada, y en general, pueden anular el deseo por completo.
Pero eso no es todo: incluso después de dejar la medicación, los efectos pueden seguir presentes durante semanas, meses… ¡o más!
Esto se debe a lo que yo llamo “la resaca del ansiolítico”, un efecto que también tiene una base emocional muy importante: frustración, resignación y desconexión con tu cuerpo.
¿Qué ocurre si no haces nada?
Lo que suele pasar es que la persona se acostumbra a no tener ganas, a no disfrutar, a no intentarlo. Y eso, a la larga, afecta a su autoestima, su placer y su relación de pareja.
Y lo más preocupante es que nadie suele hablar de esto en el momento de recetar la medicación. Se pasa por alto. El foco está en calmar la ansiedad, pero no se da ninguna herramienta para aprender a gestionarla de forma saludable.
Lo que puedes hacer si esto te está pasando
Lo más importante es que busques ayuda especializada. Si estás medicado y ves que tu sexualidad está bloqueada, te animo a consultar con un terapeuta sexual o de pareja. Vamos a trabajar tanto los efectos físicos como emocionales, y sobre todo, a ayudarte a recuperar tu deseo y conexión íntima.
Además, puedes comenzar por incorporar a tu vida prácticas que ayuden a reducir la ansiedad: hacer deporte, meditar, mejorar tu descanso, hablar con alguien de confianza o iniciar un proceso terapéutico.
Sexualidad, ansiolíticos y recuperación
Sí, los efectos de los ansiolíticos sobre la sexualidad son reales y muy comunes, pero también hay soluciones. Con la ayuda del especialista adecuado, puedes volver a sentir, a disfrutar y a reconectar contigo y con tu pareja.
Y si aún no has dado ese paso, mi equipo y yo trabajamos online y podemos ayudarte, escrine a citas@nayara-malnero.com y nos ponemos manos a la obra.
Ahora sí… ¡entra vídeo!