¿Cómo afecta nuestra personalidad a la manera que tenemos de practicar el sexo? ¿Es mejor ser más atrevido o más conservador a la hora de entender el sexo? La respuesta es, ninguna de las dos cosas es mejor: ambas tienen pros y contras.
Las personas extrovertidas suelen tener menos problemas en encontrar un compañero sexual. Tienen mayor inclinación a las relaciones esporádicas y las consiguen con mayor facilidad porque están más abiertos y tienen más habilidades social. Pero por otra parte, pueden ser más propensos a conductas sexuales de riesgo, como el sexo sin protección.
En el otro lado de la comparación está la gente introvertida. A priori son menos hábiles a la hora de encontrar una pareja, pero disfrutan más de la intimidad. Eso hace que a menudo, si encuentran una pareja adecuada, sean capaces de abrirse, explorar y experimentar más en profundidad de lo que haría una persona más extrovertida en una relación más superficial. En el lado de los contras, y agravado por Internet, la gente introvertida puede encontrar otras formas de satisfacerse sexualmente que ayuden a encerrarles más en sí mismos e impida que desarrollen sus habilidades sociales.