Una de las preguntas que más escucho en consulta —y que más preocupa a los hombres— es esta:
“¿Es verdad que la pornografía causa problemas de erección?”. Y siento decirte que sí. Pero no te preocupes, porque entender por qué ocurre es el primer paso para cambiarlo.
Antes de empezar, déjame aclararte algo: el porno no es “malo” en sí mismo. El problema aparece cuando se convierte en la principal fuente de excitación sexual. Igual que un cuchillo puede cortar pan o hacer daño… todo depende del uso.
Hay 3 efectos principales del consumo habitual de pornografía que pueden afectar a tu rendimiento sexual. Quédate, toma nota y, si te identificas con esto que te cuento, te doy dos alternativas: ver mi Masterclass gratuita sobre cómo mejorar la erección y luego sigue leyendo y toma nota.
¡Vamos allá!
1.- El porno acelera tu respuesta de excitación
Las películas están diseñadas para una cosa: que te excites rápido y mucho. Escenas intensas, cambios constantes, cuerpos irreales, sonidos exagerados… Tu cerebro recibe un chute de estímulos tan potente que reacciona al instante. Y ahí empieza el problema: cuando estás a solas o con tu pareja, los estímulos no son tan fuertes.
Entonces tu cuerpo piensa: ¿Dónde está la intensidad que necesito para venirme arriba?. Y aparecen:
- Erecciones que van y vienen o dificultad para mantenerlas
- Eyaculación rápida porque tu cuerpo se ha acostumbrado a ir “a toda velocidad”
- Dificultad para excitarte cuando estás más relajado
- Problemas para llegar al orgasmo sin porno
Cada vez más hombres jóvenes llegan a consulta con estas dificultades… y muchos no tienen ni 20 años. ¿Por qué? Porque su respuesta sexual no conoce otra forma de llegar que con la sobreestimulación.
2.- El porno puede generar dependencia
No porque sea adictivo en sí mismo, sino porque libera dopamina, la hormona del “premio”. Tu cerebro aprende: porno = estímulo inmediato + placer rápido. Y claro, quiere repetirlo. El resultado es que muchos hombres:
- Aumentan el tiempo que pasan viendo porno,
- Se masturban con más intensidad,
- Necesitan estímulos cada vez más extremos para excitarse.
Este bucle provoca dependencia y, además, deja en segundo plano actividades esenciales como socializar, relajarse, conectar emocionalmente con otra persona, disfrutar del contacto real y dejarse llevar.
3.- Crea una imagen completamente irreal de la sexualidad
Esto afecta tanto a adultos como a adolescentes, porque las escenas de estas pelis para adultos no representan cuerpos reales, no muestran un acercamiento natural, no enseñan a expresar realmente lo que queremos, tampoco reflejan el placer femenino de forma auténtica y, mucho menos, muestran lo que es una relación sexual sana real y natural.
Lo veo cada semana: chicos jóvenes que replican escenas y sienten que “no funcionan”. ¡Claro! que no funciona, porque la vida real no se parece en nada. Y luego, chicas que creen que deben actuar como actrices porno para “estar a la altura”. Y crecer con estas idea de la relación sexual y emocional, está teniendo consecuencias en personas cada vez más jóvenes.
Entonces, ¿qué puedes hacer si el porno ya te está afectando?
Primero, entender que SI tiene solución. Esto es importante. Y luego pasar a la acción y ponerte manos a la obra para poner fin de una vez a los problemas de erección. ¿Cómo hacerlo? trabajando tres pilares importantísimos:
- Físico: reeducar tu forma de estimularte y recuperar la sensibilidad real.
- Mental: reducir la anticipación, el bloqueo y la ansiedad que produce depender del porno.
- Relacional: aprender cómo funciona la sexualidad real, sin mitos ni exigencias.
Esto es lo que hacemos en mi método terapéutico patentado PAE, porque no se trata de prohibirte el porno para siempre. Se trata de recuperar el control de tu excitación, de tu respuesta sexual y de tu placer. Si te sientes identificado y crees que el porno está afectando a tus erecciones, te regalo una clase gratuita donde te explico cómo empezar a poner solución desde hoy: Cómo poner fin a los problemas de erección. Ahora sí… ¡Dentro vídeo!